Agua de mi agua
que la piel calaba
agua de los besos
que la sed saciaba
Corazón de lava
que el cuerpo abrasaba
de día al sol se bebían
de noche, con la luna, ardían
Agua de mi agua
que la piel mojaba
agua de los besos
que la sed calmaba
Poro a poro rociados
por espumas de mares agitados
estelas de sal y arrebatos
emociones y deseos gratos
Se fue en un día de sol
y espere bajo la lluvia
quizá no vuelva, quizá caracol
en su concha porfía
Si abriera por fin sus ojos
y los míos contemplara
Si extendiera su manos
y las mías sujetara...
Agua de mi agua
que la piel incitara
agua de los besos
que mi sed colmara
Son como pequeños suspiros estos versos y espero que lleguen a su destino.
ResponderEliminarUn abrazo.
Se dibuja la pasión en este precioso poema, ¡ que me encanta !, al igual que la foto tan bien elegida para el tema.
ResponderEliminargraciassss...como gotas de alma que se van derramando con cada sentimiento que se arranca en letras....La verdad es que sois adorables los dos... gente especial, de esa que se guarda en el corazón....muacksss
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