lunes, 21 de noviembre de 2011





En cada gesto de ausencia
que enmarca una sonrisa
En cada mirada que se extravía
oteando onírica el horizonte
En cada caricia
que las puntas de mis dedos
descuidadas deslizan
En cada gota de saliva
que humedece mis labios
refrescando las palabras
En cada pensamiento
que se fuga del dominio
de mi mente
En cada suspiro afligido
que mi ánimo desata
Y en cada beso, cada abrazo
cada ilusión, cada afán, desvelo
lamento, empeño, demanda
¿Por que, me pregunto
te presencio en todo?

2 comentarios:

  1. El tiempo se hace tangible
    en las caras a mi alrededor,
    las bocas tienen un rictus cansado,
    y aun así, saludamos con ternura,
    miramos a los ojos desde adentro,
    desde aquel sueño que sobrevive averiado.

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  2. Es en los "sueños averiados" donde descubrimos que volamos sin alas y luchamos sin coraza en las encrespadas olas de la vida.
    Solo la mirada nos une umbilicalmente, en su profundidad, al sentir autentico del universo de las palabras. Gracias por compartir este paseo por las rimas del viento. Un cordial saludo

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